
PEELING
Consiste en la aplicación de sustancias químicas directamente sobre la piel de la cara, el cuello, el escote y/o las manos, produciendo una descamación muy superficial de la epidermis lo que va a estimular el mecanismo de reparación y regeneración de la piel. Permite mejorar la textura y luminosidad de la piel, suavizar arrugas finas, eliminar manchas del sol superficiales o por Melasma y mejorar irregularidades de la piel secundarias a acné. Se pueden hacer entre 4 a 6 peelings superficiales al año, separados entre 2 y 4 semanas, preferiblemente en los meses de invierno, para conseguir el rejuvenecimiento de la piel o el objetivo deseado.
Nuestra Clinica
- Alonso de Córdova 5710 oficina 501 Las Condes, Santiago